Ash Ketchum o Satoshi como es originalmente nombrado en japonés, ha sido el protagonista de Pokémon por más de 22 años. Eso significa que para muchos de los que estamos leyendo esto, crecimos viendo aunque sea un par de sus aventuras y una, si no más, de sus competencias en las diferentes ligas de cada región.
Puedo decir que es un descanso ver que el muchacho finalmente lo logró. La liga siempre ha sido el clímax de todas, o casi todas las temporadas de Pokémon, y como el sueño de Ash es ser maestro Pokémon, esta competencia es un significativo medidor en la historia de Ash. Desafortunadamente al ser el objetivo principal del personaje, para que la serie no terminará Ash estaba condenado a perder.
Ash enfrentando siempre espectaculares adversidades.
Seguro, siempre hay algo que aprender de las derrotas, se puede mejorar y se puede intentar de nuevo. Todas estas fueron ideas que reposaban en el fondo de cada derrota de Ash, pero después de un tiempo empezaron a tornarse repetitivas. Es una lástima que aquellos que crearon el arco narrativo de Ash no pudieran pensar en algo más que el protagonista perdiendo una y otra vez para continuar la serie. En un ciclo que se define como «Ash llega a nueva región», «Ash captura nuevos Pokémon en la región«, «Ash empatiza y crea fuertes lazos con sus nuevos Pokémon«, «Ash consigue un rival/amigo«, «Ash combate el equipo Rocket» y finalmente siempre «Ash pierde en la liga contra su rival/amigo«.
La vida tiene muchas lecciones que entregarte y los escritores de Pokémon podrían haber puesto unas cuantas mas allí para reflejar. Ash podría ganar y tener que redefinir el ¿y ahora qué? después de que alcanzó su meta. Ash podría ganar y luego perder y luego volver a ganar, para enseñar a la gente que a veces se gana y a veces se pierde pero siempre se aprende.
Dejar ir a tus Pokémons mas fuertes no siempre es lo más sabio.
Ash nunca fue un mal entrenador. Endurecido por haber enfrentado Pokémons legendarios y enfrentar incontablemente al equipo Rocket y otros criminales, Ash ha sido dueño de Pokémons tan poderosos como su inicial Charizard o Greninja. El mismísimo Pikachu tendría que ser de altísimo nivel después de haber peleado en tantas ligas y combates abiertos. Hubiera sido espectacular haber experimentado una liga definitiva, con la anticipación de viejos y poderosos Pokémons regresando para finalmente pelear épicamente y no vernos restringidos a los Pokémons de la temporada.
Todos esperábamos que lo lograra con Greninja y pues tampoco pudo.
Ash finalmente gana la Liga Alola en la serie de Pokémon Sun & Moon, en lo que parece una respuesta a Ash perdiendo la Liga Kalos (donde había alcanzado la madurez total como personaje y entrenador). En una de la series con peor animación que ha tenido toda la saga y con fuertes rumores de que la nueva serie de Pokémon no tendrá a Ash y Pikachu como protagonistas. La victoria es agridulce y deja un fuerte sabor a nostalgia por un personaje que hubiera podido ofrecer mucho más.
Por ahora felicitaciones a Ash. La última lección que Pokémon nos deja puede ser que tras una vida de perseverancia las metas pueden alcanzarse por mucho que falles.
¡Gracias por leer!
